CR7 ya puede descansar, después de un sprint final de infarto, el jugador luso ha batido la marca de las marcas en lo que se refiere a goles: ha marcado 39, de momento, en una sola temporada.
Pero aquí no acaba la historia, porque Cristiano todavía tiene una jornada para seguir demoliendo este record y poner el nuevo listón en 40, 41… o incluso más, total es lo único que puede hacer en esta Liga, marcar goles, porque la pelea por el título hace ya mucho que la perdió.
No pretendo hacer ningún tipo de crítica a la temporada que ha hecho CR7, puesto que la cantidad de goles que ha marcado tiene su mérito, pero a lo mejor hubieran sido mejor 38 y ganar la Liga como hizo el mexicano Hugo Sánchez. Reitero que no se trata de hacer ningún tipo de menosprecio a la temporada del delantero merengue, pero una vez más tendría que valorar la importancia relativa que tiene ser pichichi cuando el Barça está a punto de hacer doblete.
También es cierto que la prensa no está ayudando mucho a descargar responsabilidades sobre el papel de Cristiano Ronaldo, puesto que todos sacan pecho y alardean de la voracidad y las ganas de meter goles de CR7, pero deberían plantearle si al año que viene su objetivo será ganar la Liga o superarse a si mismo.
Entiendo que Cristiano no tenga ninguna culpa, que de hecho sean los medios deportivos los que han alimentado toda esta lucha ficticia por un galardón que, a fin de cuentas, es menor para un equipo como el Real Madrid. Pero la cuestión es que entre unos y otros han conseguido que ser pichichi sea algo tremendamente importante, cuando lo vital para el conjunto blanco debe ser volver a una final de Champions.
Dicho todo esto, hay que dar la enhorabuena a CR7 por su magnífica temporada y esperar que en la siguiente pueda volver a ser pichichi, pero que vaya acompañado del título de Liga, que a fin de cuentas es lo que importa.
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